miércoles, 1 de diciembre de 2010

vaho

Escucho 'Milk thistle'. Conor Oberst cantándole directamente a mi esperanza, en este ciudad tan fría, el amor congelado pero vivo, la diminuta fe, pienso en Lorca "que no se acabe nunca la madeja del te quiero me quieres".

Llevo las chaquetas de lana que me regala mi abuela, que se está convirtiendo en protagonista de este blog. Me aferro a sentimientos que son como estatuas, tengo firmes monumentos dentro de un panorama en ruinas. 

Raquel, te hablo directamente a ti. Necesito una señal tuya. Me parece perfecto que hacer el amor en Lisboa distraiga de todo lo demás, pero tú felicidad me concierne por encima de muchas cosas. Y quiero que me la describas y que me digas que no te duele la espalda y que tu diastema sigue siendo muchísimo más resplandeciente que el de Madonna, que el de cualquiera. Te quiero, te quiero cada día.

Me parece fascinante que Justin Bieber sea la encarnación física de una tipología de bollera que todas hemos visto hasta la saciedad, hasta la suciedad. Lo veo en la tele y me da la risa, un ídolo de adolescentes que parece salido del baño del Escape, tras agitar su mandíbula en torno a la entrepierna de alguna desafortunada apasionada.

Me gusta tener proyectos, son como excusas del corazón, quiero hacer cosas porque quiero querer. Y proyecto una novela, un matrimonio, un regalo, un viaje, la siesta del sábado, cenas de nochevieja, anhelos por encima de mis posibilidades, por debajo de mis miedos.

Y acaba el día con Puccini, que me hace pensar en mi madre. El día que yo lleve a mi madre a ver 'La boheme', me dará un infarto de amor y sentiré que ya no estoy en deuda con esa mujer prágmatica y de dimensiones siderales.

Se acaba el día de hoy.
Una cliente me ha dicho que mi sonrisa invita a gastar.
Nunca pensé que el capitalismo pudiera encerrar un piropo.

7 comentarios:

  1. anda... que ya también me gustaría a mí oír (leer?) sus descripciones... que mira que para noticias, te recomiendo más mi espacio (en más que alguna línea encontrarás su nombre)... si suelta prenda, avísame.

    ResponderEliminar
  2. Qué bueno lo de Justin, q razon tienes!

    ResponderEliminar
  3. contigo, hasta ir al baño puede ser el mejor momento en la vida de alguien.


    J

    ResponderEliminar
  4. hola, pásate por mi blog

    (y no, no es spam latinoamericano)

    ResponderEliminar
  5. joder, júliabetrian,
    qué bonito

    :)

    zaida.

    nerea, no dejes nunca de querer.

    ResponderEliminar
  6. Nerea, escribe esa novela, quiero leerla ya.
    Y de paso podrías considerar también otros proyectos... :)

    ResponderEliminar
  7. una vez me dijiste que debería tatuarme ésta frase en la frente:
    "si hago un agujero en españa caeré en el corazón de australia"
    ahora, yo te pido que te tatues ésta:
    "tu sonrisa invita a gastar", me parece brillante e indudable.

    ari.
    nochevieja, qué ganas.

    ResponderEliminar